miércoles, 22 de julio de 2015

Del invierno y otras hierbas (o por qué el fernet es tan grandioso)

Llegó el invierno y con él, todas las enfermedades típicas de la época: vivimos con la nariz roja, resfriados, desganados y por sobre todo, nuestro bolsillo parece papelero de baño público repleto de pañuelitos de papel (si es que no te limpiaste con otra cosa).

Sin embargo, la naturaleza es bastante sabia y nos ofrece una gran variedad de alimentos de uso cotidiano que nos ayuda a curar esas afecciones tan molestas. Así es, tenemos que hablar de las especias.


Ustedes pensarán que el azafrán sirve solamente como colorante del fatídico arroz amarillo, pero no. El pequeño (y caro) condimento amarillo sirve para mejorar el funcionamiento del sistema circulatorio, alivia la gripe, y la tos. Y de postre, como sabemos que a muchos el invierno les pega fuerte, es un gran antidepresivo al aumentar la producción de serotonina (la hormona de la felicidad).

También el tomillo es un buen aliado. Sirve para prevenir resfríos, tos y anginas. Además, previene las caries y mejora el mal aliento. Seguramente no tenían este dato.

El orégano, pero a pesar de ser una gran molestia cuando termina en las encías (y convierte a una muzzarella en la peor pesadilla cuando salen con sus parejas) contiene la bendita vitamina C (previene resfríos) y ayuda a controlar la tos.

Otra especia más que importante para el invierno es el laurel. No, no tengan miedo, no se van a quedar solteros si les toca. Al contrario, tiene propiedades más que generosas: Cura afecciones del sistema respiratorio como la gripe, faringitis y bronquitis.

Y cómo olvidarnos del clavo de olor? Hasta el día de la fecha nadie sabe decirnos de donde viene ni para que sirve (y mucho menos la cantidad justa para condimentar la comida) pero nuestros estudios arrojan que calma dolores de garganta y es un potente antiséptico. Con suerte, también les quita el dolor de muelas.

Como si todas esas molestias invernales fueran pocas, también hay que reconocer que en el invierno tendemos a comer mucho más, ingerimos alimentos más calóricos y con mayor frecuencia, bebidas espirituosas aparte. Por lo tanto, nos arriesgamos a decir que la tasa de indigestiones aumenta drásticamente.

Para esto tenemos la solución: si, llevas 10 minutos leyendo sobre especias y hierbas, obviamente les vamos a contar sobre las propiedades de algunas que les ayudan a regularizar su estómago, intestinos e hígado. Por eso les proponemos utilizar en tus comidas poleo, ajenjo y menta, que son geniales para aliviar las afecciones estomacales y hepáticas.


Y si les decimos que pueden ingerir todas estas especias milagrosas de una sola vez? y si además les aseguramos que además de curarles de los resfríos, podemos ayudarles a que se sientan mejor si se pasaron en las comidas?


Y si te decimos que tomes fernet? Si señores, no hemos hecho otra cosa que nombrarte los ingredientes de esta milagrosa infusión (así es, los médicos recomiendan tomar infusiones en el invierno).

No pretendemos hablar sobre los míticos orígenes del licor ya que son míticos, y no queremos romper de ninguna manera con el mismo. Pero si que a raíz de todo esto, podemos decirles que es la mejor época del año para tomar un buen fernet acompañado de una bebida cola (no podemos dar marcas, pero ya sabemos cual es la única combinación aceptada por la Comisión Nacional Del Fernet y el sentido común).
Si no están conformes con las propiedades más que ventajosas para tomarlo en invierno, podemos explicar las razones físico-químicas que lo hacen un aliado inseparable de la “winter season”.


El hielo. El hielo en invierno tarda mucho más tiempo en derretirse, lo que hace más duradera y placentera a la bebida. Todo lo contrario pasa en la temporada estival, cuando si no se toman el trago en un plazo no menor a 10 minutos todo termina siendo un caldo similar a la famosa sopa instantánea, en sobre, y con sabor a choclo de plástico.

Como si todo esto no fuera poco, si el bar donde estas compartiendo con tus amigos tiene Pop-App Resto, podemos decirte que tu fernet puede llegar un 30% más rápido. Además, nunca más van a tener un malentendido sobre las proporciones y preparación, porque el mozo puede ponerle una simple aclaración al barman sobre como lo prefieren.


Todos queremos que el verano llegue pronto, sin embargo, disfrutemos de un buen fernet este invierno. Y este verano también, por qué no?.

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